Miles de fieles judíos acudieron anoche bajo un fuerte dispositivo de seguridad israelí de seguridad a rezar a la Tumba de José en Nablus, en el territorio palestino ocupado de Cisjordania, en una visita que derivó en enfrentamientos con palestinos de la zona.

"Durante la noche, el Ejército, la Policía de Fronteras, agentes policiales y la Administración Civil aseguraron la entrada de miles de fieles a la Tumba de José en Nablus", informó hoy el Ejército israelí en un comunicado.

A su llegada al lugar, las fuerzas encontraron dos granadas hechas a mano que fueron detonadas de manera controlada sin provocar daños o heridos y estallaron "disturbios violentos durante los que los palestinos lanzaron piedras y una bomba incendiaria a un vehículo del Ejército", que respondió "con medios de dispersión de masas".

Además, un sospechoso fue arrestado y trasladado para ser interrogado después de que se produjeran disparos desde un coche en marcha contra un vehículo militar, abundó la nota.

La tumba del patriarca José es venerada desde hace siglos por cristianos, judíos y musulmanes. El Ejército israelí se retiró del sitio al principio de la Segunda Intifada, en septiembre 2000, y desde entonces quedó en manos de la Autoridad Nacional Palestina (ANP).

Se encuentra situada en área A de Cisjordania, donde la ANP tiene pleno control administrativo y de seguridad, de acuerdo a la división territorial establecida en los Acuerdos de Oslo (1993).

El Ejército israelí supervisa en coordinación con la ANP el acceso de fieles judíos para rezar en el lugar del cenotafio donde se venera al bíblico patriarca, unas visitas que, pese a estar coordinadas con sus autoridades, muchos palestinos consideran una provocación y una señal de que quieren hacerse con el lugar.

 

Fuente: Agencia EFE