Human Rights Watch (HRW) insta al presidente de EE.UU., Joe Biden, a defender la libertad de expresión, incluidos los pedidos pacíficos a un boicot a Israel.

El subdirector de la División de Oriente Medio y África del Norte de HRW, Eric Goldstein, mediante un comunicado emitido el lunes, dijo que el nuevo mandatario estadounidense debería oponerse a las leyes que penalizan a las empresas que buscan cesar sus vínculos con los asentamientos en Cisjordania, que, según la Cuarta Convención de Ginebra, son ilegales.

Goldstein explicó que el objetivo de las compañías sería evitar la complicidad en inevitables violaciones de los derechos humanos.

Sin embargo, expresó sus dudas acerca de que Biden ponga fin a los intentos de Washington por dañar la campaña del movimiento Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS), unos esfuerzos que amenazan la libertad de expresión.

BDS es un movimiento propalestino lanzado en 2005 por más de 170 organizaciones palestinas, que impulsaban “diversas formas de boicot contra Israel hasta que cumpla con sus obligaciones bajo el derecho internacional”. Entre otras cuestiones, exige el fin de la ocupación de Palestina, la igualdad para los ciudadanos árabe-israelíes y el derecho al retorno de los refugiados palestinos.

Asimismo, el alto funcionario de HRW continuó denunciando que el exsecretario de Estado de EE.UU. Mike Pompeo no dejó de acusar al citado movimiento propalestino de ser “antisemita”, sino que también se sumó a grupos que utilizan el derecho internacional como base para instar a las empresas a evitar los asentamientos israelíes.

Las colonias israelíes en los territorios palestinos ocupados desde 1967 son consideradas ilegales por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Unión Europea (UE) y la gran mayoría de países, por violar la Convención de Ginebra al erigir edificaciones en terrenos ocupados.

En los últimos años, esta práctica se aceleró bajo el impulso que le imprimió el premier israelí, Benjamín Netanyahu, y su aliado estadounidense, el expresidente Donald Trump, que, con su polémico plan anti-Palestina —el llamado ‘acuerdo del siglo’—, ha animado a dicho régimen a anexionarse más territorios palestinos.

No obstante, la victoria de Biden en las elecciones presidenciales de EE.UU., que considera los planes anexionistas de Israel un obstáculo para una solución de dos Estados, preocupa al régimen de ocupación.

 

Fuente: Hispan TV