Cuando Israel apunte a los palestinos con sus armas de precisión, la UE haría bien en reconocer su papel cuando emita las declaraciones habituales.

En 2018, la compañía de defensa israelí Elbit  ganó  un contrato de €59 millones ($ 63.7 millones) para proporcionar  sistemas de vigilancia de drones  en el Mediterráneo para la UE. "Haber sido seleccionado por las autoridades de la Unión Europea es otro voto de confianza en el Hermes 900 al seguir las adjudicaciones de contratos adicionales para este UAS en Europa, Asia Pacífico, América Latina e Israel", declaró el Gerente General de Elbit, Elad Arahonson.

El contrato puede renovarse por dos años adicionales. El martes, el Monitor Euromediterráneo de Derechos Humanos solicitó a la UE que  cancelara  el contrato por dos razones principales. La vigilancia con drones brinda la oportunidad de transgredir el derecho internacional, ya que elimina la obligación de los buques de prestar asistencia. Para limpiar el Mediterráneo de refugiados y violar el derecho internacional, la UE ha elegido la tecnología israelí que ya ha sido probada en la población civil palestina.

El ex relator especial de la ONU y presidente del consejo de administración de Euro-Med Monitor, Richard Falk, declaró: "Es indignante que la UE compre aviones no tripulados a los fabricantes israelíes considerando las formas represivas e ilegales que los aviones no tripulados se han utilizado para oprimir a los palestinos que viven bajo ocupación".

Israel se ha establecido firmemente como un admirado violador  del derecho internacional, como lo indica la declaración de Arahonson que muestra el alcance global de la tecnología militar y de vigilancia de la entidad colonial. La UE, en particular, continúa superando los parámetros de su propia hipocresía a la hora de defender la supuesta política de consolidación de la paz.

La colaboración del organismo con Israel es indignante en términos de violaciones de los derechos humanos, sin embargo, esto también es una extensión de cómo la comunidad internacional ha normalizado la violencia colonial de Israel contra el pueblo palestino.

En su sitio web, el Servicio Europeo de Acción Exterior afirma que: "El compromiso de la Unión Europea con la paz no es retórico". Quizás la declaración se hubiera beneficiado de una admisión de fachada retórica. Para Israel, las imprecisiones no importan ya que trabajan a favor del proyecto colonial. Los palestinos, por otro lado, están atrapados en una dinámica política donde la Autoridad Palestina continúa elogiando a la UE como su socio político. Mientras tanto, la UE puede manipular resultados políticos para los palestinos al tiempo que fortalece sus lazos con Israel, ayudándole a exportar su tecnología de vigilancia para ser utilizada contra aquellos que la UE considera indeseables.

La construcción de la paz, como la UE describe su diplomacia, se trata de silenciar a los oprimidos, utilizando la ideología y la tecnología del colonizador. El acuerdo recíproco entre Israel y la UE para ayudarse mutuamente en la represión de las poblaciones debería detenerse, pero la UE ha abdicado de su responsabilidad moral y política. La Autoridad Palestina, que depende de la ayuda de la UE para financiar su existencia, no expresará ninguna oposición a que se usen drones israelíes para las medidas de vigilancia europeas. Una vez más, la lucha política palestina se ve obstaculizada por la desigualdad perpetua que forma las bases de la construcción de la paz.

Sin embargo, esta colaboración a nivel regional debería servir como un incentivo para exponer el papel de la UE en obstaculizar, en lugar de apoyar a los palestinos y sus derechos. La Autoridad Palestina bien puede seguir llamando a la UE un socio importante en la ilusión de la construcción del Estado, pero el pueblo palestino ha experimentado las ramificaciones de la participación de la UE de primera mano. La UE no solo se beneficia de las armas probadas en el pueblo palestino, sino que también ayuda a Israel a garantizar que Palestina se agote constantemente para evitar incluso la hipótesis de un estado palestino. No hay fundamento sobre el cual la UE pueda reclamar la construcción de la paz que no sean sus propias narrativas ficticias. Cuando Israel apunte a los palestinos con sus armas de precisión, la UE haría bien en reconocer su papel cuando emita las declaraciones habituales.

 

Fuente: Ramona Wadi, Middle East Monitor / Traducción: Palestinalibre.org Palestinalibre.org