Las Naciones Unidas publicaron un informe el jueves 11 de agosto, en el que se revelaba que una media de 50 pacientes con casos extremadamente graves, entre los que se encuentran pacientes de cáncer, se ven privados diariamente del acceso a tratamiento, cirugías y cuidados necesarios, desde el último cierre de los pasos de Erez.

Según el informe, desde el comienzo de la última ronda de agresiones israelíes contra Gaza, se ha retrasado la entrada de 14 máquinas de rayos X portátiles y de piezas de repuesto para dispositivos médicos.

 

Ante la incapacidad del sistema sanitario de la Franja de Gaza para proporcionarles servicios de tratamiento, como consecuencia de la falta de personal médico especializado, y la escasez crónica de medicamentos y suministros médicos, especialmente de material de radioterapia y de laboratorio necesario para realizar pruebas de diagnóstico. Se calcula que las necesidades sanitarias más urgentes ascienden a 2 millones de dólares, incluyendo medicamentos y material fungible, suministros de laboratorio y combustible para los principales hospitales.

 

Cabe destacar que durante la última agresión murieron 47 palestinos, entre ellos 16 niños, además de resultar heridas cientos de personas, entre ellas 151 niños y 58 mujeres.

 

Seis hospitales trabajaron para activar los planes de preparación para emergencias en la reciente agresión, además de la Sociedad de la Media Luna Roja Palestina, y el Hospital Al-Quds aumentó la capacidad de sus camas en caso de tener que recibir un número adicional de pacientes del Hospital Al-Shifa.

 

En su informe, las Naciones Unidas advirtieron de un aumento de los altos niveles de trauma, estrés y trastornos psicológicos.

 

Cabe señalar que el hospital de Alshifa carece de personal y de suministros hasta el punto de que los médicos tienen que realizar una media de 65 a 70 horas semanales, durante los días normales de trabajo, cifra que está sujeta a aumentar en tiempos de escalada militar israelí.

 

En una entrevista que mantuvimos ayer con el médico Baker AbuJarrad, más conocido por una foto suya que se hizo viral mientras sostenía y presionaba manualmente una bolsa de suero en un intento de recuperar las constantes vitales de un paciente que llegó con graves heridas causadas por un ataque aéreo israelí en la última ronda de ataques del domingo 7 de agosto de 2022.

 

La fuente reveló que, aparte de las heridas ya desesperantes que ven, lo más frustrante que experimentan es ver cómo aquellos que tienen la esperanza de sobrevivir pierden su oportunidad mientras esperan horas para obtener los permisos y autorizaciones de las autoridades de ocupación israelíes para ser trasladados a hospitales de Cisjordania o de las zonas ocupadas de la franja, alcanzando un nivel de daño irreversible y convirtiéndose en casos sin esperanza.

 

Añadió que, a veces, el permiso de un paciente llega sólo para que su acompañante sea rechazado, teniendo que volver a solicitar otro permiso y perdiendo un tiempo imprescindible para su supervivencia.

 

Mientras que algunos de los médicos de al-Shifa tienen la capacidad intelectual y la experiencia para realizar procedimientos mucho más complejos, la falta de herramientas y maquinaria hace que su capacidad para realizarlos aquí sea imposible, quedando una vez más a merced de un ocupante que pone dificultades para permitir que estos instrumentos entren en la franja y que los pacientes puedan salir para recibir tratamiento en otro lugar.

 

Cerrar los cruces y no permitir que los pacientes palestinos con afecciones graves viajen para recibir tratamiento, especialmente después de las rondas de enfrentamientos, se considera una perpetuación de una política de castigo colectivo contra más de dos millones de ciudadanos palestinos que residen en la Franja de Gaza, y una grave violación del derecho internacional humanitario, especialmente del Cuarto Convenio de Ginebra de 1949.

 

Así lo confirma la declaración realizada por el ministro de Defensa israelí, Benny Gantz, el miércoles 5 de agosto, en la que vincula las condiciones humanitarias y de vida de los residentes de la Franja con la seguridad de "Israel". Esto es una continuación del enfoque israelí basado en el castigo colectivo y la venganza contra la población civil.

 

Fuente: https://daysofpalestine.ps/the-israeli-occupation-takes-revenge-on-gaza-patients-deprives-them-of-treatment/