Los cristianos palestinos celebran hoy la Navidad a pesar de las restricciones israelíes. Un árbol de Navidad fue adornado en la plaza de Manger, en Belén, delante de la Iglesia de la Natividad

En el mismo lugar fueron celebradas una serie de actividades para niños y familias, entre ellas la construcción del Poblado de Papá Noel.

Habitualmente los mercados de la ciudad están abarrotados en Navidades, gracias a los miles de turistas extranjeros que viajan a Belén para presenciar las diversas celebraciones religiosas. Sin embargo, este año los comerciantes se quejaron de que los negocios lograron menos ingresos que en años anteriores.

A lo largo de la última semana, el ejército israelí bloqueó varias carreteras en Cisjordania y asaltó varias localidades y ciudades palestinas en busca de unos agresores que habían abierto fuego contra soldados israelíes.

“Generalmente sobrevivimos gracias al periodo de vacaciones, pero este año la actividad comercial es débil. La inseguridad es una de las razones,” declaró Marwan Salibi, que regenta una tienda de antigüedades en Belén, a la página web Arab News.

“Visitamos Belén una o dos veces todos los años,” explicaba Sally Awwad, procedente de un pueblo cercano a Jenín, en el norte de Cisjordania. “Solía venir con mi familia, pero ahora he venido con amigos de diferentes ciudades. Compramos suvenirs y rezamos en la Iglesia de la Natividad,” añadió.

“Siempre espero que Belén, el lugar en el que nació Jesús, se convierta en un lugar libre que pueda ser visitados por los cristianos de toda Palestina y de todo el mundo. Pero esto no es así, porque vivimos bajo una ocupación,” agregó la joven.

El presidente palestino Mahmud Abbas también envió un mensaje al mundo con ocasión de la Navidad. “Queremos que [Jerusalén] sea una ciudad abierta para la oración y para todos los creyentes y seguidores de todas las religiones (…) y que nuestro pueblo pueda ejercer su derecho a la libertad de culto en sus lugares sagrados, tanto musulmanes como cristianos”.

 

Fuente: Middle East Monitor