El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, visitó ayer el asentamiento ilegal judío en territorio palestino ocupado de Nativ Haavot, al sur de Jerusalén, y prometió: "Nadie nos arrancará de aquí"

El jefe del Gobierno israelí visitó el bloque de asentamientos ilegales de Gush Etzion, donde se encontró con residentes de Nativ Haavot, líderes colonos y representantes de la sociedad civil.

Visitó también el conocido como Roble Solitario, situado en el centro de Gush Etzion y que, declaró, "simboliza el asentamiento, la redención de la Tierra de Israel, el corazón de la Tierra de Israel; sus raíces son profundas y mandan sus ramas hacia el cielo. Este es el pueblo de Israel, nadie nos arrancará de aquí".

El jefe del gabinete de ministros plantó un árbol en el asentamiento, junto a varios representantes colonos, según informó un comunicado difundido por su oficina.

"Nos quieren desarraigar de aquí y no lo lograrán. Plantaremos más a más", prometió.

El líder del partido Likud criticó que haya sectores que crean que "para lograr la paz con los árabes" los judíos "tienen que ser desarraigados de su tierra".

"En lo que a mi concierne, no habrá desarraigo de los asentamientos y no habrá un cese de los asentamientos, sino exactamente lo contrario", dijo.

Y recordó a las nuevas generaciones que es su deber "garantizar la eternidad de Israel", como manda el Libro de los Libros.

"Sé que sin la habilidad de levantar la espada de David no estaríamos aquí. Y por eso estamos haciendo lo que es necesario para garantizar que estaremos aquí", añadió.

Sus declaraciones tienen lugar cuando queda poco más de tres meses para las próximas elecciones generales, convocadas para el 9 de abril.

Fuente: Agencia EFE