La visita del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, a Israel, prevista para el 31 de marzo, promete ser blanco de protestas por parte de los palestinos, según confirmaron fuentes desde Gaza, citadas hoy por el diario digital Brasil 247

De acuerdo con el portal, tal información emanó del periodista y escritor Jamil Chade, basada en un relato de Raji Sourani, uno de los principales activistas palestinos y abogado en Gaza.

'En una entrevista al blog (de Chade) por teléfono, el palestino explicó que una manifestación en diversas ciudades ya estaba organizada para el 30 de marzo, un día antes de la llegada del brasileño'.

Pero detalló que 'las protestas ganarán un componente de repudio al nuevo posicionamiento del Gobierno de Brasil en lo que se refiere a la cuestión palestina'.

Chade recuerda que Bolsonaro prometió cambiar la Embajada de Brasil desde Tel Aviv a Jerusalén, y así violaría resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y acentuaría con una indicación de que el Gobierno cancela la antigua reivindicación de Israel por el control de la llamada Ciudad Sagrada.

'Además, Brasil dio fuertes demostraciones de que pasará a apoyar al Gobierno de (Benjamin) Netanyahu en los foros internacionales...Itamaraty (cancillería brasileña) modificó su tradicional posición en la ONU y votó contra los palestinos en resoluciones en el Consejo de Derechos Humanos', refiere el corresponsal.

El excapitán del Ejército adelantó que desea viajar a Israel para negociar acuerdos de cooperación tecnológica en las áreas de agricultura, seguridad, militar y pesca, entre otras, y establecer una política de gran asociación con el Estado de Israel.

Se espera asimismo que Bolsonaro y Netanyahu aborden en su plática la propuesta de traslado de la embajada de Brasil desde Tel Aviv a Jerusalén.

El mundo árabe y musulmán advirtió al político brasileño de extrema derecha que de cumplirse ese cambio se afectarían de forma negativa los lazos comerciales.

Brasil procura seguir los pasos de los gobiernos de Estados Unidos y Guatemala, en contra de las directrices de las Naciones Unidas, que considera que el estatus de la ciudad debe acordarse en negociaciones entre Israel y Palestina.

En 2010, Brasil fue el primer país sudamericano en reconocer un Estado palestino basado en las fronteras anteriores a 1967.

 

Fuente: Agencia Prensa Latina